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Minería

CCE rechaza categóricamente acusaciones sin fundamento

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Vivimos en un país de leyes y de instituciones. Las empresas y las organizaciones del sector privado siempre hemos seguido puntualmente las previsiones del marco jurídico para orientar nuestras inversiones, tanto en generación eléctrica, como en comercialización y suministro.

Denostar a las empresas que invierten en México, y que generan empleos bien remunerados para miles de ciudadanos, es una práctica perversa que hace daño a toda la sociedad. Lo que todas y todos queremos es que sea la colaboración entre el gobierno y las empresas la vía para mejorar la calidad de vida de las familias mexicanas.

No es justo que el Gobierno de México ataque, sin razón, a las empresas del sector privado por haber respetado históricamente la ley. Es un contrasentido, sin justificación en un régimen democrático, y cancela la posibilidad de sumar esfuerzos para enfrentar los desafíos de nuestro país.

El Poder Ejecutivo presentó hace algunas semanas una reforma constitucional en materia eléctrica. Compartimos la visión de que la salud financiera de la CFE y la garantía de electricidad de bajo costo para la población debe ser una prioridad para México. Corresponde ahora al Poder Legislativo analizar los méritos de la iniciativa de reforma.

Las organizaciones del sector privado hemos propuesto un análisis serio, sustentado con datos e información sólida, verificada. Estamos dispuestos a participar en todos los foros que los legisladores organicen para plantear nuestros puntos de vista y las propuestas que beneficien a las instituciones públicas y a las familias mexicanas.

Los mexicanos no admitimos que desde el gobierno se nos ataque sin lógica ni fundamento. Nuestra preocupación es que logremos reactivar la economía, fortalecer las inversiones y crear los empleos que los mexicanos exigen para mejorar la calidad de vida de las familias.

La visión de transformación nunca avanzará a través de la confrontación. Las acusaciones sin fundamento sólo destruyen el tejido social. Las ideas que benefician a la gente en una nación, siempre se implementan con base en la colaboración.

Que no se intente atribuir culpas a las empresas mexicanas porque las verdaderas causas del deterioro en la CFE están en otra parte. Una empresa pública requiere visión de futuro, liderazgo, una buena administración, evitar el aumento de su pasivo laboral y manejar responsablemente sus finanzas.

México puede y merece un sistema eléctrico diversificado, con una CFE fuerte y participación privada con fuentes limpias y de bajo costo, que permitan combatir el cambio climático y ofrecer mejores precios a las empresas y las familias.

Fuente: Consejo Coordinador Empresarial