Efectos del covid en el oro y la plata
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La pandemia provocada por el virus covid-19 puso en suspenso al sector minero mexicano, literalmente; pero mientras el ritmo de producción se vio afectado, los precios del oro y la plata alcanzaron niveles récord.
Por una parte, en abril y mayo pasados, ante la contingencia sanitaria, el Gobierno de México mandató que la minería frenara sus operaciones, y llegado junio las unidades mineras remontaron el vuelo paulatinamente. Por otro lado, la reactivación de la economía, principalmente en China, ha estado impulsando el precio de metales como el cobre, oro, plata y hierro.
Tal vez la más favorecida en este sentido ha sido la plata, que de un promedio de US$14 la onza llegó a un máximo de US$26.8 por onza en el mes de julio, un incremento del 90%.
El oro no se quedó atrás, de un promedio de US$1,400 por onza en 2019, llegó a superar la barrera de los US$2,000 en el mes de agosto del 2020, y actualmente se conserva arriba de US$1,870, en el marco del inicio de la presidencia de Joe Biden en Estados Unidos.
La variable del precio continúa favoreciendo la actividad minera en esta ocasión, sin embargo, en el caso particular de México, la producción minera mantiene su tendencia ligeramente a la baja. Si analizamos datos gráficos sobre la producción minera del año 2020, podemos observar una disminución importante en la producción de oro, plata y cobre, tríada que aporta el mayor valor a la producción minero-metalúrgica nacional.
Con base en cifras del INEGI, se espera que la disminución en la producción de oro sea del 12.4%, en comparación con el año 2019, lo que se debe principalmente al descenso de casi el 50% de la producción en los meses de abril y mayo. Algo parecido sucede con la plata, siendo más pronunciada la baja productividad en el mes de abril (casi el 40% menos) y recuperándose en los meses siguientes. Finalmente el comparativo del 2020 con el año anterior se proyecta en un descenso del 6.4%.
Si en el 2021 se logran conservar los precios de los metales y si incrementan las reservas existentes a la fecha, podrían resurgir yacimientos que por su baja ley, y en relación con el precio de los metales en los mercados internacionales, han sido calificados como no viables económicamente.
Fuente: Mundo Minero