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Gobierno de Argentina apuesta por su industria minera

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El Presidente Javier Milei busca convertir a Argentina en una potencia cuprífera global, impulsado por su reciente triunfo legislativo y por una agenda orientada a atraer inversión extranjera al sector minero.

Aunque el país no exporta cobre (a diferencia de Chile, su vecino y principal productor mundial) bajo su territorio yacen algunos de los yacimientos sin desarrollar más grandes del planeta. La administración de Milei considera que el metal rojo será clave para diversificar una economía históricamente agrícola, generar empleo y sumar divisas.

Milei ha reformado el marco de inversión y puesto en marcha el programa RIGI, que ofrece estabilidad fiscal por 30 años, menores cargas impositivas y flexibilidad cambiaria. También permite a las empresas recurrir a arbitraje internacional, medida que ha sido bien recibida por desarrolladores de proyectos como Glencore, BHP y First Quantum, que evalúan inversiones por unos US$26 mil millones.

De acuerdo con consultoras especializadas, cuatro de los 12 mayores proyectos de cobre greenfield del mundo están en Argentina. Su puesta en marcha podría elevar la producción del país por encima del millón de toneladas anuales hacia 2035, situándolo entre los cinco productores más importantes a nivel global.

El sector aún enfrenta desafíos relevantes: falta de infraestructura para movilizar mineral desde los Andes, escasez de mano de obra especializada, financiamiento costoso y una legislación que restringe actividades cerca de los glaciares. El Gobierno buscará modificar este último punto con su renovada fuerza en el Congreso.

Si bien el cobre no resolverá por sí solo los problemas estructurales de Argentina, especialistas coinciden en que podría convertirse en un pilar relevante para la captación de divisas. Las comunidades, por su parte, mantienen opiniones divididas tras episodios ambientales pasados, aunque cada vez más sectores —incluidos algunos vitivinicultores— muestran apertura ante la posibilidad de desarrollar una nueva industria estratégica.

Fuente: Mundo Minero