Fresnillo plc mantiene el tesoro de la lectura en las comunidades aledañas a sus operaciones
Compartir

Caborca, Sonora, 20 de febrero de 2025.- Fresnillo plc, a través de Minera Penmont, realiza actividades de vinculación comunitaria para entender los principales retos a los que se enfrentan las personas que habitan en las zonas aledañas a sus operaciones, con el fin de trabajar a favor de la formación de capital humano, así como de la cohesión del tejido social.

En este sentido, desde 2017 Minera Penmont puso en marcha el programa Picando Letras, que promueve la lectura de manera lúdica e integral al formar mediadores de lectura. “En Picando Letras vemos a la lectura como una herramienta para cultivar la imaginación y la educación. A través de los libros las personas no solo aprenden, también pueden viajar a otras realidades, otros lugares, y experimentar situaciones de vida que, de otra manera, podrían ser ajenas”, señaló Martín Gerardo Rochín, gerente de Minera Penmont.
Con la iniciativa de Picando Letras, que se realiza en colaboración con Ensamble Alejandría, Fresnillo plc reconoce el papel fundamental para el bienestar comunitario de quienes se dedican a la docencia. El foco de este programa es, por ello, la capacitación de maestros y maestras, no sólo como docentes, sino también como potenciadores de la creatividad de las infancias y juventudes.

“El programa también es una herramienta para mejorar la comprensión de lengua, perfecciona la ortografía y amplía el vocabulario, lo que abre oportunidades educativas para las y los niños de las comunidades”, indicó el gerente de Minera Penmont.
El 14, 15 y 16 de enero de 2025 se realizaron tres talleres, en los que participaron 52 docentes de 17 escuelas primarias de comunidades como Siempre Viva, Diamante, Coyote, Morelos, Y Griega, y San Felipe. Las sedes de los talleres fueron el salón de actos de El Coyote; la escuela primaria Ford #66 de la comunidad de La Y griega, y la escuela José María Morelos de la comunidad 15 de septiembre.
Además de la capacitación, Picando Letras también consiste en el donativo de equipos de lectura, en los que se incluyen 100 libros, un librero (conocido en el programa como bunko), así como tapetes y cojines para que los niños estén cómodos cuando leen.

Igualmente, y conscientes de que la familia es el lugar en el que las niños y niñas crean hábitos y valores, Picando Letras también tiene un componente de talleres dirigidos a padres de familia, para que el hogar sea el primer lugar en el que se promueva la lectura.