El precio del litio se desploma

Mientras que la industria del litio sigue detenida en México, el precio del metal ha perdido el 80% de su valor en los últimos dos años, principalmente a causa de una sobreoferta y una débil demanda de vehículos eléctricos.

Desde enero del 2023 a finales de octubre del 2024, la tonelada de litio ha caído de aproximadamente US$70,000 a US$10,000, modificando los planes de quienes soñaban hacer su agosto con el “oro blanco”.

Tal es el caso de Argentina, cuyas grandes reservas alojadas en salares han perdido brillo, lo que se refleja en que las compañías mineras han reducido drásticamente sus operaciones y planes de expansión, obligadas por el colapso del mercado.

Ante esta situación, compañías como Galan Lithium, empresa australiana con operaciones en Argentina, redujo su guía de producción un 25%, pasando de 5,400 a 4,000 toneladas de litio anuales.

También Australia se las ve negras, ya que es el principal productor de litio a nivel mundial, pero a diferencia del cono sur, sus yacimientos están alojados en roca, lo que hace tres veces más costosa la producción. Por lo tanto, la caída del precio también se ha traducido en recortes de personal, cancelación de proyectos y ajustes en los planes de producción.

En este escenario desafiante, la segunda mayor minera del mundo, RioTinto, adquirió la productora de litio Arcadium, lo que habla de que se tiene fe a largo plazo en el metal. Por su parte, los gobiernos buscan ofrecer incentivos para apurar este mal trago.

Según analistas, no todo está perdido para el oro blanco, pues tiene buenos fundamentos con los vehículos eléctricos, pero consideran difícil que pueda alcanzar los precios del 2023, y acaso rondaría los US$18,000 por tonelada para el 2030.

Fuente: Mundo Minero